Este proyecto se presenta como una oportunidad para replantear el concepto del espacio de trabajo. Un concepto que ya venía repensándose y la pandemia del 2020 aceleró su proceso. Es claro que en el mundo post-Covid19 los espacios de trabajo tienen que evolucionar, la pregunta es ¿Cómo? El nuevo espacio de trabajo debe de ser un lugar seguro donde se pueda maximizar la creatividad y productividad de las personas. Es por esto por lo que nuestro primer elemento de diseño fue crear espacios amplios, altos y ventilados, donde la disposición de los lugares de trabajo, así como la circulación estuvieran pensados en conjunto para evitar aglomeraciones en las estaciones de trabajo, así como en los traslados de un espacio a otro dentro del mismo coworking. Al ser un espacio de trabajo común se logró disponer del programa de tal manera que los usuarios siempre cuenten con una sana distancia, independientemente de la actividad que estén realizando.